El tacto una forma de enseñar

El tacto pedagógico es una forma de actuar en la educación, así como referirse a las formas en que los padres y madres pueden actuar con los niños. Es una forma en la que los profesores pueden actuar en las relaciones de enseñanza-aprendizaje. Algo que aprendí con la lectura de tacto pedagógico es que si se le muestra interés a los alumnos podemos hacer que salgan adelante, pero que también hay que también hay que tener paciencia. Debemos dejar que nuestros alumnos tomen sus propias decisiones pero sin que lleguen a tener tanta libertad, esto puede ayudar para que los niños vayan superando sus miedos pero también debemos estar atentos a las diferentes situaciones que puedan surgir de sus miedos. Otro de los casos que se puede observar es que en un grupo existen muchos niños a comparación del año anterior por lo que la maestra no les puede dar la misma atención que antes; por lo que nosotros debemos de procurar darles la atención que se merecen, pero para esto debemos tener tolerancia para poder estar con todos los alumnos al mismo tiempo y responder a las dudas que surjan en ese instante; sobretodo debemos estar atentos a como se siente el niño, como ve, donde esta, que dificultades tiene para realizar ciertas cosas, después de esto puede ayudarlo en las dificultades que se le presenten al niño, ya que si el maestro tenga mas comunicación con sus alumnos obtendrá mayores resultados. También debemos buscar una manera de influir más en los niños. Otra de las cosas que nos dice el tacto pedagógico es que el Profesor debe ser capaz de demostrar seguridad y tacto; pero si el docente tiene falsa seguridad es frágil y se rompe con facilidad ante cualquier conflicto por lo que existen formas de manejar situaciones sociales mediante la intimidación, la dominación y el ejercicio autoritario del poder, los profesores que tengan estas bases puede que logren tener confianza en si mismos, pero también es necesario tener la confianza de sus alumnos.

El tacto tiene que tratar los aspectos objetivos y subjetivos de la experiencia del niño, donde el niño sienta que el profesor cree en ellos, el profesor debe creer en las posibilidades y a bondad de los niños de los que somos responsables durante mi práctica. Otra de las cosas que nos habla la lectura es que los profesores debemos escribir con claridad ya que somos el ejemplo de los niños. El verdadero aprendizaje tiene lugar cuando el conocimiento, los valores y las actitudes que adquirimos tienen algo que ver con la persona en que nos estamos convirtiendo y convertimos a nuestros alumnos. Nosotros como Profesores podemos hacer que lo difícil resulta fácil para los niños pero todo depende con que tacto nos damos a entender y como explicamos las cosas. Una manera de darnos a entender con los niños es viendo que l e interesa al niño. El problema más frecuente con el que nos enfrentamos los maestros es la falta de disciplina dentro del grupo; pero, ¿Qué es tener disciplina en un grupo? La disciplina está relacionada con la noción de discípulo, una persona disciplinada está dispuesta a aprender a ser conducida al orden, por lo que si hay disciplina, existen las condiciones para el verdadero aprendizaje. La lectura me pareció muy interesante ya que muestra los problemas por los que pasa un docente y que sobretodo una buena arma es el tacto con que se trata a los niños.

-Manen, Max van (1998), “El tacto pedagógico” y “El tacto y la enseñanza”, en El tacto en la enseñanza. El significado de la sensibilidad pedagógica, Barcelona, Paidós (Paidós Educador, 135), pp. 159-214.